martes, 29 de septiembre de 2009

Iglesia de Santo Melón


Iniciaré este blog con un tema que no es nuevo pero que me come las entrañas, les platicaré a manera de chisme, ya que estamos tan acostumbrados a la voz de Paty Chapoy. Resulta que iba caminando cierto día en el zócalo de Cuautla, pues quizá muchos no lo saben pero no suelo caminar mucho por la calle, pero ese día caminaba muy tranquila, cuando de pronto que creen que vi? ... bueno ya basta de hablar como Paty, no es sano para los niños. Lo que tampoco es sano es salir de paseo con la familia por el zócalo de la Ciudad de Cuautla, Morelos y observar a nuestra hermosa Iglesia de Santo Domingo pintada de un extravagante color melón con bordes naranja carmesí, aunque ese color melón en el vestido de una Quinceañera no se vería tan corriente, me resulta indignante, parece que esa estrechez de visión no solo afecta la economía de una región, ahora hasta la envoltura de nuestra ciudad ha pasado de lo ordinario a lo ridículo; entiendo que no es el palacio de Bellas Artes pero tampoco es la casa de Doña Juana construida el año pasado ¿Pueden imaginar a la Catedral del centro histórico en el Distrito Federal pintada de color pistache? Lo más patético y exasperante quizá no es que la pintaron, sino que la escalera no alcanza a llegar hasta arriba así que la iglesia parece un enorme duvalín y de sabor melón, por cierto el otro sabor sería algo así como mugre blanca o guanábana podrida... (creo que no estoy siendo objetiva, sigamos...) Ésta Iglesia tiene su historia, está declarada como Patrimonio de la humanidad por la UNESCO junto con otras iglesias y monasterios de la región, su nombre completo es Iglesia y Ex-convento Santo Domingo de Guzmán y fue construida en el año de 1580; es de comprender que el deterioro de una construcción antigua es inminente, ya que literalmente fue agarrada para taxi, se utilizó como Fuerte en el sitio de Cuautla de 1812, sirvió como cuartel del ejercito Zapatista, incluso fue una Preparatoria y Casa de la Cultura, pero acaso es este un pretexto para que luzca tan... ¿nueva? a decir verdad, no es una queja por las infamias cometidas a este edificio arquitectónico protegido por importantes organizaciones mundiales, es una queja contra el exceso de mal gusto sumado a un bajo presupuesto (bueno eso es algo que yo no sé, afortunadamente no sé cuanto cuesta pintar una iglesia).


Yo nací en Cuautla, y me enseñaron los maestros desde muy pequeña que nuestra hermosa ciudad tiene 2 adjetivos que la califican y describen, por supuesto en honores a la bandera, la maestra con voz chillona hasta lo grita con orgullo: La Heroica e Histórica Cuautla, Morelos. Pues ya que Cuautla tuvo la suerte (jejeje) de ser sitiada por 72 días y de vivir un infierno sin agua ni suministros, mínimo deberíamos sacar partido de esto, la verdad me molesta sobremanera hablar de temas en los que tenga que mencionar la palabra Gobierno o Ayuntamiento así que me limitaré a soñar con la posibilidad de que un restaurador que no tenga nada que hacer un día llegue a nuestro querido centro que no parece histórico y se compadezca del pésimo gusto de aquel sujeto que cometió ese crimen y restaure la iglesia, por otro lado tendremos que contratar a una organización secreta que se encargue de borrar todo indicio de la iglesia duvalín, incluyendo las fotografías que sacó algún despistado ya sea por voluntad propia o que haya sido forzado por dicho responsable que seguramente se habrá gastado lo de 2 años de sueldo mío en pintura color melón.


Quizá peco de purista y conservadora (tengo buena escuela cuando de eso se trata) incluso podría decirse que estoy viendo y no veo, yo entiendo que Cuautla es un municipio pequeño y que el presupuesto jamás alcanzará para hacer nada, con eso de que las rejillas de drenaje cuestan $20,000 pesos, (en serio yo escribí lo anterior y sin pruebas?) El punto es que el mal gusto es el mal gusto.

Yo sé que no hay mucho que hacer al respecto y mucho que decir de nuestra pintoresca ciudad, a mi parecer va en retroceso, pero si escribo esto es porque en mí aún hay esperanza, probablemente la gente dirá que es más importante pavimentar las calles de las ampliaciones, pero yo digo que todo es importante, una ciudad se define por sus construcciones, por la cultura de la gente que habita y por la historia que haya vivido, así que no esperen calles pavimentadas antes de merecerlas.

Presupuesto para Restauración de Cubierta de Iglesia: 86,548 dólares QUE PREFIERAN PINTAR LA IGLESIA DE SANTO DOMINGO CON UN DELICIOSO COLOR MELÓN, NO TIENE PRECIO, Perdón creo que no aplica, esa pintura seguramente no fue gratis.

Si he ofendido al hartista (del verbo hartar) que creó esa obra color melón, no me disculpo pero quiero que sepa que si lo comprendo.


Olivia Carrillo